martes, 6 de mayo de 2025

La Ruta del Élder Parley P. Pratt en Chile.

 

 

 

La Ruta del Élder Parley P. Pratt

en Chile.

 




Élder Parley P. Pratt (1807-1857).

En el año de los 160 años de su visita a Chile.

1851-2011.

Por

Rodolfo Acevedo A.

 

 


Vamos a hacer un viaje hacia la ruta del Élder Parley P. Pratt en Chile y este viaje nos llevará a recorrer 293 kilometros, saliendo primeramente desde Santiago con destino de Valparaíso cubriendo una distancia aproximada de 116 kilómetros.

 


 

Luego y después de visitar los lugares por donde él vivió y caminó en Valparaíso, viajaremos a Quillota por una distancia de 68 kilómetros, para regresar finalmente desde Quillota a Santiago  a una distancia de 109 kilómetros.

 

Será este un viaje hacia la historia, hacia la experiencia de los primeros misioneros mormones que viajaron a Chile en 1851, a saber el Élder Parley P. Pratt, su esposa Phoebe y el Élder Rufus C. Allen.

 


Valparaíso a mediados del siglo XIX.

 

 

 

El Presidente de la Misión del Pacífico

 

“Santo, Feliz, Puro y Libre”

 

 

Élder Parley P. Pratt.

 


 

San Francisco, 1850. Oleo de George Henry Burgess.

 

Durante este invierno fui llamado por la Primera Presidencia y apartado para hacerme cargo de una Misión General al Pacífico. Compuse una canción, que fue cantada ante la congregación en el Tabernáculo, con ocasión de nuestra partida a esta misión, y que comenzaba ”Santo, feliz, puro y libre” P.P.Pratt.

 


 

“Presido sobre todas las islas y costas del Pacífico, bajo la dirección de la Primera Presidencia de la Iglesia - para abrir la puerta a toda nación y lengua, tan rápido como el camino esté preparado y el Señor lo indique, para la predicación del evangelio de salvación”. (P. P. Pratt, 16 de marzo de 1851).

 

 

 



Utah y el propuesto Estado de Deseret

 

El trabajo está prosperando maravillosamente en Deseret, Inglaterra, Gales, Escocia, Suiza, Italia, Dinamarca, Suecia, Noruega, etc. Varios jóvenes que están conmigo irán a Chile y Perú en su debido tiempo. (Carta de P.P. Pratt a Addison Pratt SAN FRANCISCO, Julio 26, 1851).

 

 

 

“Llegué a este lugar en algún momento del mes de julio, junto con aquellos que me acompañaron a esta misión. Si la Presidencia desea comunicarse sobre cualquier tema, las cartas dirigidas a mí en San Francisco, California, me serán remitidas a Chile, o a otra parte,  ya no saldré de este lugar sin asignar a un agente para que reciba y envíe todos los documentos y comunicaciones… Espero abandonar este territorio pronto para ir a  Sudamérica. Estoy estudiando el español con toda diligencia, y voluntad, y confío dominarlo en unos pocos meses”. (Carta de P.P.Pratt a Brigham Young, SAN FRANCISCO, 28 de agosto de 1851).

 

 



 

Mientras revisaba los diarios de la época hoja por hoja buscando huellas del paso de nuestros hermanos misioneros por Chile, me di cuenta de que “El Diario” de Valparaíso publicaba las listas de las cartas sobrantes en el correo. Pensé que tal vez el Élder Pratt por su llamamiento debería recibir correspondencia y que probablemente durante su estadía en Quillota más de alguna correspondencia para él habría llegado a Valparaíso. Es así como me puse a revisar las listas de las cartas sobrantes y en “El Diario” del día viernes 27 de febrero de 1852 apareció una carta consignada con el N° 195, dirigida a P.P.Pratt. (Nota de Rodolfo Acevedo)

 

 

 

 

 

 

 


 

 

 

Ejemplar de Key to Theology existente en la Biblioteca Nacional de Chile. Edición 1872.

 

“Durante mi estadía en San Francisco escribí una proclamación del evangelio dirigido a los pueblos de las costas e islas del Pacífico, la cual fue posteriormente publicada por el élder Wandell en Australia. También comencé el libro titulado Key to Theology. En una reunión pública de los Santos, el Élder George K. Wimmer fue unánimemente elegido y apartado para presidir sobre la rama de San Francisco - siendo yo mismo honorablemente relevado de los deberes de la misma, con la vista puesta en una misión a Chile”. P. P. Pratt.

 

 

 

“Sept. 5. – Zarpé para Valparaíso; Chile, a bordo de la barca Henry Kelsey. Después de un tedioso y desagradable viaje de sesenta y cuatro días, llegué a salvo a Valparaíso, el 8 de noviembre, acompañado de mi esposa y del Élder Rufus Allen, todos con tolerable  salud”. P. P. Pratt.

 

 

 

 

 

 

 

 

BARCO “HENRY KELSEY,” OCEANO PACÍFICO,

                                                                                                                                                     Lat. 24 N., Lon. 115 W.,

Sept 15, 1851.

 

          Querida Familia:- Aquí estamos sobre las profundidades, con rumbo a Chile, S.A.- Phoebe, R. Allen y yo. Salimos de San Francisco el día 5 del corriente. Hemos tenido buen tiempo, exceptuando tres días, en los cuales estuvimos encalmados; y hemos navegado más de once mil millas. Nosotros estamos ahora avanzando ante el viento unas siete millas por hora. Todos nos hemos mareado, y no nos hemos recobrado completamente. Somos los únicos pasajeros, y tenemos la cabina a nuestra disposición, excepto durante las comidas. Estudiamos español cada día. Es un hermoso idioma, y maravillosamente adaptado a la simplicidad de los Lamanitas. Espero perfeccionarlo durante el viaje y en unos pocos meses de residencia entre los chilenos”. P. P. Pratt.

 

 

“Octubre 5 – Costas del Perú, S.A., lat. 3 grad, 30 m. S. Un mes hemos pasado sobre el océano; con mucho viento en contra, algunas calmas, y más o menos algunos mareos nos han afectado por turnos hasta este momento. No hemos sido capaces de leer, escribir, o estudiar mucho, por lo tanto el tiempo ha pasado realmente en una forma muy tediosa.

          Tenemos a un avaro por capitán quien piensa más en su moneda de seis peniques que en nuestras vidas o aún en la suya propia. Él no permite que el mayordomo cocine papas, pan, pastel, budines o cualquier otro alimento saludable, sino que nos mantiene con pan duro enmohecido, lleno de bichos y gusanos, charqui y cerdo - el cerdo está podrido. Él tiene harina, papas y buen cerdo, pero no permite que sea usado; así usted podrá darse cuenta fácilmente de que nos encontramos en una muy incómoda situación.

          La tarde anterior estuvimos a punto de naufragar, habiendo navegado cerca de la tierra sin saberlo, cuando cayó la calma. El barco se hizo inmanejable, y cambió su dirección hacia la orilla, pero echamos ancla y esperamos la luz del amanecer, y cuando conseguimos aligerar el peso con mucho trabajo, se pudo hacer otra vez a la mar”. P. P. Pratt.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El arribo del Élder Pratt a Valparaíso.



Muelle de Valparaíso, siglo XIX

Él Élder Pratt arribó a Valparaíso, Chile, procedente de San Francisco de California el día 8 de noviembre de 1851, en un viaje que le tomó 2 meses sobre las aguas del Oceano Pacífico. Ellos habían salido desde el puerto de San Francisco el día 5 de septiembre de ese año.

Encontré al país en un estado de guerra civil, la mayor parte de los negocios en un punto muerto - y los corazones de los hombres debilitados por el temor”. P. P. Pratt.

 

                Al llegar a Valparaíso, los misioneros dirigieron sus pasos desde el muelle al Hotel Francés donde se hospedaron … HOTEL FRANCÉS, Valparaíso, Chile, S.A.

Noviembre 9.

         Queridos amigos: Después de un muy desagradable y tedioso viaje de sesenta y cuatro días hemos al fin arribado a puerto, en tolerable condición de salud. Llegamos ayer al mediodía, y nos hospedamos y tomamos pensión completa en el Hotel Francés, donde tenemos una gran variedad de buena comida, y un salón principal para nosotros - el precio es de cuatro dólares diarios por los tres. El propietario habla francés, el recepcionista francés, con un poco de inglés, la dueña de casa alemán, el camarero español, y nosotros inglés con un poco de español”. P.P. Pratt.

 

“El domingo asistimos a una reunión en un edificio muy grande. Vimos a miles de personas de ambos sexos, y de todas las clases sociales y edades, colmar el lugar, inclinados sobre sus rodillas y adorando ciertas imágenes y pinturas con mucha aparente devoción. No se dieron instrucciones en ningún idioma, ni música, ni voz o sonido, excepto una baja, y monótona voz al fondo del salón, que no se dirigía a la gente, y que no era lo suficientemente alta o clara como para ser comprendida por ellos”. P. P. Pratt.

 




La construcción de la Iglesia La Matriz se inició en 1837 y se concluyó en 1842. 

 

 

Luego buscaron una casa para arrendar y la encontraron en la Calle Victoria de Valparaíso.




Domingo, noviembre 16.

“Queridos amigos: - Durante la semana pasada, hemos arrendado una casa, comprado muebles e iniciado los quehaceres domésticos. Dedicamos casi todo nuestro tiempo al estudio del idioma español. Nuestra casa está en la parte trasera de un conjunto de edificios que dan frente a una grande y hermosa calle, llamada Victoria.  Ésta se abre a un gran patio, rodeado de altas murallas y de otros edificios, y está llena de hermosos árboles, como naranjos, higueras, duraznos, perales, etc., junto con rosas y una gran variedad de otras flores y arbustos. Sus veredas y pavimentos están cuidados y barridos, y las casas alrededor de ella están ocupadas por viudas, huérfanos, etc., de una buena clase de españoles o chilenos, y sus amables y sociables jóvenes y niños.

 



Actual Calle Victoria de Valparaíso (Foto Rodolfo Acevedo)

                Distribuimos nuestro tiempo entre la lectura y el estudio de nuestras lecciones de español, y conversando, visitando, leyendo español, escuchándolos leer, y jugando con los más pequeños, etc., todo lo cual les agrada mucho, y hace que nosotros progresemos en el idioma con una rapidez que nos sorprende a nosotros y a ellos. Realmente la Providencia ha guiado nuestros pasos y nos ha puesto en agradables circunstancias, como extranjeros en una tierra extraña, y entre una gente con un idioma extraño. Realmente Él ha abierto nuestro camino para aprender este idioma, y nosotros lo haremos si somos diligentes”. P. P. Pratt.

 

Noviembre en Chile

Extracto de un poema de Parley P. Pratt.

Es la primavera del año, y todos los manantiales están colmados,

Toda la naturaleza está preñada de vida y de amor;

Un coro de voces asciende desde cada remanso,

Una miríada de pájaros cantores anima la arboleda.

A su nido en los Andes, el cóndor va a descansar,

Los vientos de Magallanes no prevalecen más,

Y el sol, con la brisa nortina que regresa, inspira

Nueva vida en el céfiro, y amor en el viento.

El bosque está vestido con su ropaje de fresco verdor -

Donde la paloma canta un himno, para atraer a su compañero.

La huerta está vestida como una reina de fiesta,

Y el capullo está floreciendo con plenitud de gozo.

El naranjo, el olivo, la higuera y la parra,

Están vestidos como en el Edén de inocente lozanía;

La tierra es un altar de incienso divino,

Exhala el dulce aroma del más rico perfume.

 

Cita de Élder Pratt de un hecho histórico.

 

1.      Chile. Batalla de Loncomilla.

 

 


Batalla de Loncomilla.

 

“En Chile, la actual revolución ha terminado con la pérdida de muchos miles de vidas, y sin éxito”. P. P. Pratt.

 

La Batalla de Loncomilla fue un combate desarrollado en el marco de la Revolución de 1851. La batalla se desarrolló el 8 de diciembre de 1851 en el llano cercano al río del mismo nombre, cerca de donde después se fundaría Villa Alegre, en la provincia de LinaresChile. El bando leal al gobierno fue dirigido por Manuel Bulnes, mientras que el bando opositor estuvo a cargo de José María de la Cruz.

 

 

 La Muerte del Niño Omner


 

El Cementerio de Disidentes se ubica en la calle Dinamarca 14 en el Cerro Panteón, anteriormente se le conoció como Cerro Cementerio. 

 


Antigua calle de piedras llamada Dinamarca que lleva al Cementerio de Disidentes en Valparaíso, Chile.

 

Un Hecho digno de consignar fue el nacimiento y la muerte de Omner Pratt, hijo de Parley P. Pratt y Phoebe Pratt, quien nació en Valparaíso el día 30 Noviembre 1851 y falleció en el mismo puerto el día 7 Enero 1852.

 

La inspiración de poeta que llevó al Élder Parley Parker Pratt a escribir inspirados himnos, también se manifestó al cantar a la naturaleza chilena, con hermosos versos que sin duda llevaron alegría a su alma, la misma alegría que se convertiría en un inmenso gozo cuando el día 30 de noviembre su esposa Phoebe dio a luz un hermoso varoncito a quien llamaron Omner. Sin embargo, muy pronto, esta felicidad se transformaría en una profunda tristeza, al dejar de existir el niño Omner y ser sepultado en uno de los cerros de Valparaíso conocido como Cerro Panteón.

 

El cerro Panteón es uno de los 42 cerros de la ciudad de ValparaísoChile. Se encuentra rodeado por las subidas Cumming y Ecuador y tiene su base en la calle Condell. Se encuentra a un costado del cerro Cárcel, formando parte de la cadena central de cerros porteños. Su nombre se debe a que el cerro alberga tres cementerios de la ciudad: el Cementerio N° 1, el Cementerio de Disidentes y el Cementerio N° 2.  Para comienzos del siglo XIX los habitantes de Valparaíso enterraban a sus muertos en el mar o en lo alto de los cerros, ocasionando una crisis sanitaria. En 1825, el gobierno compró los terrenos para fundar un cementerio en el cerro, que en ese entonces se encontraba en la periferia de la ciudad. Nació así el Cementerio N° 1, para los católicos y el de Disidentes, producto de la gestión de inmigrantes británicos para poder sepultar a los que no profesaban la fe católica.

Un acceso antiguo al cementerio era la Quebrada Elías, hoy día llamada calle Ricardo Cumming, que da a la Plaza Aníbal Pinto.  Desde la Plaza Aníbal Pinto, la calle Ricardo Cumming (la antigua Quebrada Elías), conducía a los antiguos porteños hacia los cementerios por una escalera que aún existe, por la calle Ricardo Cumming, por el lado poniente, hasta llegar al pasaje C. Mondaca”.

 

Del triste acontecimiento de la muerte de Omner  que no aparece registrado en la Autobiografía de Parley P. Pratt, leemos en el libro “The Archer of Paradise” (El Arquero del Paraíso) lo siguiente:

 

“El 30 de noviembre (de 1851), el segundo hijo de Phoebe, Omner, nació. Ningún doctor se pudo encontrar cuando comenzó el trabajo de parto. Dos mujeres de Valparaíso actuaron como parteras, ya que Phoebe no estaba pujando a causa de sus dolores, las dos mujeres la levantaron tomándola por debajo de sus brazos, la sacudieron violentamente hacia arriba y hacia abajo, hasta que ellas literalmente arrojaron al niño al mundo”.

 

Sin duda que las penurias del viaje, la pésima alimentación, la debilidad de Phoebe a causa de lo mismo, los trabajos del parto sin ninguna comodidad, fueron factores que se combinaron para que el bebé falleciera el día 7 de enero de 1852, siendo sepultado esa misma noche “en una solitaria colina de Valparaíso”.

 

El niño fue sepultado en el Cementerio de Disidentes de Valparaíso, lugar a donde eran llevados aquellos que no profesaban la fe católica.

 

 



Registro  N° 992, que consigna la sepultación del niño Omner.






Fecha de Sepultación (día 8) Causa de muerte (Debility)



 

 



El cuerpo sin vida del niño  Omner  fue ingresado al cementerio el día 8 de enero de 1852 y la razón declarada en el registro de su muerte fue debilidad.

 

 

 


Placa que recuerda e identifica el lugar donde fue sepultado el niño Omner Pratt en Valparaíso, Chile.

 

            En 1990, en una ceremonia de conmemoración de la visita de Parley P. Pratt a Chile, una placa recordatoria fue puesta en el cementerio donde su hijo Omner fuera sepultado en 1852. En la ocasión el Élder Waldo P. Call de los Setenta, un descendiente del Élder Pratt descubrió la placa. Él también dedicó el lugar donde se encuentra la tumba del niño Omner. En sus palabras dedicatorias Élder Call pidió una bendición especial para Chile, expresando en parte de ella lo siguiente: "Que bendigas a aquellos que gobiernan; y bendícenos como miembros de la Iglesia para que por medio de vivir el evangelio dignamente tú puedas bendecir a este pueblo, para que haya paz, para que haya alimentos en las mesas de todas las familias chilenas, y para que ellos puedan escuchar el mensaje del evangelio y puedan sentir que es verdad”.

 

            La mayoría de los extranjeros avecindados en Valparaíso por aquellos días eran protestantes de nacionalidad inglesa o norteamericana, como el pastor David Trumbull de la Unión Church o Iglesia Congregacional Americana quien tenía a su cargo la administración del cementerio de Disidentes, que se ubicaba  en el Cerro Panteón.

El Administrador del cementerio don David Trumbull dejó registros de la sepultación del niño Omner, los cuales pueden verse en el libro de registros de esa época que aún se conserva en el cementerio.

 

Después de vivir esta triste experiencia el Élder Pratt escribió:

19 de enero de 1852.

 

            “Hemos seguido residiendo en Valparaíso, y estudiando español diligentemente hasta este día. Hemos hecho mucho progreso, siendo capaces ya de entender en parte lo que leemos de las escrituras en español, y en los diarios, así como en la historia. Nosotros hemos reunido también mucha información general sobre los países de Hispano América, su cultura, sus costumbres, sus leyes, sus constituciones, sus instituciones – civiles, religiosas, etc”.

 

Por su parte en carta al Presidente Brigham Young, le señaló:

“También he leído un pequeño trabajo, sobre Historia Natural de Chile, casi tres veces, en el cual hay muchos curiosos e importantes datos relacionados con las guerras de la brava y patriota nación de hombres libres llamados Araucanos. Éstos han mantenido su libertad e independencia inalterable por 300 años contra los poderes combinados de la vieja España y de todas sus colonias, sosteniendo una guerra defensiva, con muy poca tregua, por casi 200 años, sin armas de fuego u otros medios modernos de defensa. Parte de su historia espero traducir y publicar posteriormente.

            También he leído en español el texto escolar de la geografía de Chile, y algunos otros trabajos, mientras que una constante lectura de sus diarios, además de los de Perú y de Buenos Aires, me han dado una visión general de sus gobiernos, leyes, políticas, religión, revoluciones, esperanzas y proyectos”.

 

 

 El Viaje a Quillota.

 

“Salimos de Valparaíso en una carreta tirada por bueyes,

y llegamos en la mañana del 25 (Enero 1852) a Quillota,

un pequeño pueblo situado en un hermoso y fértil valle...

ubicado a unas 36 millas de Valparaíso.”  P.P.Pratt.

 

 

Quillota cuya significación autóctona es “refrescante” fue la segunda ciudad de Chile que acogió a los élderes Allen, Pratt y su esposa Phoebe. Por aquel entonces era un pequeño y tranquilo poblado campesino, enclavado en medio de un valle con un microclima privilegiado, y con una variada y rica producción agrícola, especialmente frutas como paltas, chirimoyas, lúcumas, etc.

 

La ruta de nuestros misioneros que viajaban con destino de Quillota se inició en el Cerro Esperanza de Valparaíso. La actual Avenida Valparaíso que se extiende desde Von Schroeders y que cruza  casi toda la ciudad de Este a Oeste, anteriormente fue el camino que unía Quillota con Valparaíso y por eso el nombre que lleva.

También por la actual calle Barros Arana (Antiguo Camino de Valparaíso a Quillota) transitó Charles Darwin y por ella pasó Diego Portales antes de ser asesinado en el Cerro Placeres. Siendo parte de la Hacienda “Las Siete Hermanas”, que dio nacimiento a Viña del Mar.

 


 

Una escena de viaje en carreta tirada por bueyes en los días de la visita del Élder Pratt a Chile.

 

“El más antiguo de los que cruza Viña es el antiguo camino carretero de Quillota —o “Real Camino de Quillota”— el cual unía al puerto de Valparaíso con esta última localidad. Su construcción —o arreglo— en 1792, obra del ingeniero José Hidalgo, constituyó una de las obras públicas más importantes del gobierno de don Ambrosio O’Higgins, en los años finales de la colonia. La vía tuvo una gran importancia comercial para ambas localidades, pues fue utilizada por “arrieros y vivanderos con cargas de leña, hortalizas, carnes y menestras para el abasto de los porteños y el surtimiento a los navíos”. La construcción habría sido finalizada a comienzos del siglo XIX, como parte de una largo corredor que unía al puerto de Valparaíso con la provincia Argentina de Cuyo. Una vez terminado, permitió la salida más expedita del trigo desde el valle del Aconcagua para su embarque… En Viña del Mar, el camino accedía por el cerro de Torquemada atravesando el llano del mismo nombre. Luego cruzaba por la quebrada del Moye en la Hijuela de Reñaca y ascendía hasta una serie de lomas, en lo que sería hoy Gómez Carreño. Este recorrido es equivalente al trayecto que existe desde el camino internacional, por la parte norte de la comuna, hasta las afueras de la población “Gómez Carreño”. Posteriormente desciende por el sector de Granadilla hasta llegar a Santa Inés. La huella original por donde descendía en este punto, en la actualidad, atravesaría el cementerio de Santa Inés desde su acceso norte, hasta la calle de acceso principal del recinto…

 

 


En la parte posterior del cementerio de Santa Inés se puede apreciar la huella del camino ascendiendo por el cerro.


Luego descendía por lo que es hoy la calle Concón, donde recientemente fue remodelado un antiguo “hito” que conmemora el paso de este histórico camino por Santa Inés. Se unía en el plan de la ciudad con la calle San Antonio hasta la altura de 10 Norte donde vuelve, en la actualidad, a su denominación original de calle Quillota hasta el estero. No podemos especificar el lugar exacto donde cruza el Marga-Marga, pero es muy probable que corriera diagonalmente hasta la continuación de la calle Quillota y luego enfilara por la calle Valparaíso o Álvarez hasta llegar a Agua Santa. Aquí ascendía hasta la actual avenida Diego Portales, arteria que se adentra a la población de El Recreo. Esta sección fue conocida desde finales del siglo XIX como el “Camino Público a Valparaíso”, y continúa hasta el cerro Esperanza por la actual avenida “Camino Real”, cuyo nombre, por cierto, es un homenaje al Real Camino de Quillota”[1]

 




En este plano la línea blanca marca la huella original del camino de Quillota por Viña del Mar.

 

           

            De su viaje a Quillota escribió el Élder Pratt:

 

 

 “Salimos de Valparaíso en una carreta tirada por bueyes, y llegamos en la mañana del veinticinco a Quillota - un pequeño pueblo ubicado en un hermoso y fértil valle con un río a treinta y seis millas de Valparaíso.

         Aquí hemos arrendado una casa y vivimos con una viuda y dos hijas, jovencitas de quince y diecisiete años; ellas son muy sociables, y están contentas con nosotros. Pueden leer español, y hacen todo el esfuerzo posible por enseñarnos su idioma. Son muy francas y amigables, y lucen  tan inocentes como si fueran niñas pequeñas.

 

 


Bajada a Valparaíso. De Auguste Borget. Biblioteca Nacional

 

         Les he leído el Nuevo Testamento en español, lo cual les agrada mucho, ya que nunca antes lo habían leído.

         La gente de este pueblo luce muy pulcra, es una gente amorosa y sociable; muy amigable, franca, y muy accesible. Ellos son mayormente blancos, inteligentes y de buen parecer; muy llanos y sencillos en el vestir y en sus costumbres. Las casas son mayormente limpias y bonitas, y están ubicadas en línea con las murallas de barro que separan las calles de los jardines y viñedos.

         Las casas están construidas de ladrillos, enyesadas y blanqueadas tanto por fuera como por dentro; con pisos de ladrillos y techos de tejas. Muchas de ellas, sin embargo, no tienen más piso que la tierra, y muy pocas tienen ventanas de vidrio. Las calles son estrechas y se cruzan en ángulos rectos. Un claro, y frío arroyo corre por el centro de cada calle, y vastas hileras de altos e imponentes álamos, así como árboles frutales y viñas adornan todo el valle, tanto en el pueblo como en el campo.

 

         Una montaña o colina circular, tal vez de unos 500 pies de altura, se levanta en medio del pueblo, y está rodeada por todos sus lados por la planicie del fértil, bien regado y bien cultivado valle. Esta colina está cercana a nuestra residencia, es de fácil acceso, y domina una vista de todo el valle con sus granjas, huertos, viñedos, pueblos, calles, ríos y diques, es fértil como el Edén y se extiende hasta perderse en la lejanía; limitando con elevadas colinas y cadenas de montañas, cuyas ondulaciones más bajas entroncan con rejas y casas, y está cubierta de rebaños y hatos, mientras que sus laderas están accidentadas con precipicios rocosos, y sombreadas por oscuras quebradas, o mantos de nubes; mientras que las accidentadas cumbres reposan con solemne grandeza sobre el regazo del claro cielo azul, no obscurecido por las nubes o por ninguna de las obscuras sombras del mundo inferior.

 


 

Vista de Quillota desde el Cerro Mayaca.

 

         La tierra de este valle es extremadamente fértil, y fácilmente irrigada por pequeños canales que salen del río.

         El panorama que se presenta desde la cumbre en el centro de la colina, presenta una de las más hermosas escenas que jamás haya visto tanto en el viejo como en el nuevo mundo.

 

 


Una vista del Valle de Aconcagua.

 

         La cumbre de esta montaña es un lugar para el retiro y la oración, lo cual intento hacer cada tarde al ponerse el sol o durante el crepúsculo. Higos, ciruelas, peras, duraznos, manzanas, naranjas, uvas, y, verdaderamente, muchos tipos de frutos son muy abundantes aquí. Un cuarto de dólar es suficiente para comprar bastante comida para los tres y para todo un día. Los higos y las ciruelas son dulces como la miel, y se derriten en la boca. No hay mayor necesidad de otras comidas. Las uvas, los duraznos y las manzanas generalmente no han sido cosechados todavía.

         Habiendo vivido en Quillota por un mes regresamos a Valparaíso, y el 2 de marzo nos embarcamos a bordo del barco “Dracutt” para San Francisco; levamos anclas el 5 de marzo, y salimos del puerto con una suave brisa”. P. P. Pratt.

 

 

Una Carta desde Valparaíso, Chile, 1851

 

Estando aun residiendo en Valparaíso el Élder Pratt escribió la siguiente carta, la que fue publicada en el Millenial Star del día 15 de febrero de 1852 y que nos brinda una visión de sus sentimientos en esos momentos:

 

Valparaíso, Chile, Sudamérica, Nov 24, 1851.

 

Queridos Hermanos.- Solo como me encuentro en este oscuro rincón de la tierra, siento aplicar por luz, alivio, y edificación a esa tierra de donde provengo, y donde tengo tantos queridos amigos y conocidos, y a ese luminoso orbe que fue primeramente puesto en movimiento por mi como Editor. Por favor envíen el STAR tan a menudo como sea publicado, dirigido a P.P. Pratt, Valparaíso, Chile. Yo lo voy a ir a buscar a la oficina de un vapor Inglés en esta ciudad. Por favor también envíen por el mismo medio un paquete de los números anteriores, y todo lo que pueda ser interesante. También les agradeceré que me envíen un pequeño paquete de Libros de Mormón, y envíenlos por el mismo medio, si ellos los van a traer. Yo pagaré los fletes y derechos, si la oficina  del STAR puede proveer a un solitario peregrino tal presente. Por favor también escríbanme una carta, informándome de lo que envían, y por qué conducto. Tal vez será bueno también consignar el paquete de libros a la oficina del vapor en esta ciudad; pero, sin embargo, ustedes rápidamente sabrán que hacer al aplicar en la oficina de esta línea de vapores en su ciudad.

         Escríbanme una buena y larga carta, por supuesto si tienen algo de que escribirme. Yo estoy un año atrasado con la información. Yo he vivido cuatro o cinco años en las montañas, he viajado tres meses por el desierto, y navegado sesenta y cuatro días en el solitario océano, y he arribado aquí el 8 del presente, entre una gente que habla otro idioma, y como si esto fuera poco para coronar el vapor de oscuridad y de larga oscuridad, una guerra civil se está viviendo aquí, y nadie habla, escribe, o imprime mucha luz sobre cualquier otro tema.

         Ustedes deben haber leído de hambre por la palabra del Señor; bueno, agreguen a eso un hambre por noticias, y un hambre por escuchar a nuestros hermanos, y ustedes podrán formarse una idea de nuestra situación. El Élder Rufus Allen me acompaña aquí, y el Élder Philo B. Wood pronto vendrá. Estamos estudiando el “Idioma Español.” Nosotros ya estamos comenzando a comprender y a hablar un poquito. También leemos y comprendemos las publicaciones en español y la Biblia. Yo espero, en el curso de un año o dos dar a Hispanoamérica el Libro de Mormón en su propia y fluida “Lengua” si es la voluntad del Señor.

Teniendo la presidencia de las Islas y las Costas del Pacífico bajo mi cargo, ya he asignado misiones en varios lugares. El Élder John Murdock está a cargo de la misión en Australia, incluyendo Nueva Zelandia, Nueva Holanda y las Tierras de Van Dieman. Él navegó desde San Francisco para Sídney, hace más de dos meses, acompañado del Élder Charles W. Wandell.

         Élder Philip B. Lewis tiene a su cargo la Misión de las Islas Sándwich, siendo ayudado por una media docena de jóvenes. Élder Addison Pratt está todavía en las Islas de la Sociedad y también algunos otros, pero la Iglesia allí tiene mucha presión de los franceses. En San Francisco, California, el trabajo está prosperando. La Iglesia allí está con un muy buen espíritu, y sus números ya superan los cincuenta miembros.

         Por favor representen a las Islas y Costas del Pacífico en vuestra próxima Asamblea General, y a la Asamblea de Hispanoamérica en particular. Esta asamblea tiene los siguientes límites – por el oeste el océano Pacífico, por el sur el Cabo de Hornos, y al este el Atlántico y al norte los Estados Unidos de Norteamérica. Incluye un área de unas 6000 millas, de norte a sur, y 3000 de este a oeste; está compuesta del Imperio del Brasil, las repúblicas de Buenos Aires, Chile, Perú, Bolivia, Colombia, Guatemala, México y muchos estados pequeños, tribus, etc. Probablemente conteniendo a unos cuarenta millones de habitantes, con una vasta mayoría que entiende el idioma español, cuando las llaves de la plenitud del evangelio se den vuelta en el idioma español, este es el vasto campo que se abrirá ante la asombrada visión; y lo mejor de todo esto, es que más de dos tercios de estos habitantes son descendientes de Lehi, y están incluidos en las promesas de Abraham, Isaac, Jacob, José, Nefi, etc, etc, etc. Esta vasta Asamblea no tiene sino solo una rama de la Iglesia, ubicada en Valparaíso, Chile, y que consiste de tres miembros, a saber, yo, mi esposa, y el hermano Allen: esto es más que toda la Asamblea de Irlanda cuando fuera representada por primera vez por el Élder Dan Jones en la Conferencia General de las Islas Británicas, la cual comprendía a él y a su esposa, tal como los registros del  Millenial Star lo muestran.

         Querido hermano, F. D. Richards (A quien supongo me estoy dirigiendo) – si entre las decenas de miles de Santos en las Islas Británicas, que se están regocijando en la verdad, hay algunos que todavía me recuerdan y los días de nuestro pequeño comienzo, por favor denle a ellos mis más cálidos respetos, recuerdos y afecto; y lo mismo a aquellos que aman la verdad, a quienes no he visto en la carne. ¡Oh! como me gustaría visitar Inglaterra y Escocia una vez más, y también Gales; pero el tiempo es precioso, la cosecha es grande, y los obreros son pocos. Nuestras visitas, nuestro tiempo libre, y la plenitud de nuestro gozo debe por lo tanto ser adscrito hasta el fin de la cosecha, hasta que la última gavilla se apile en el carro, y sea ordenada pulidamente en el granero, y el restrojo junto con la paja y las cizañas sean quemados.

         Que Dios les bendiga a todos, y también a los trabajadores en el continente, ahora y en el mundo sin fin. Amén.

         Yo soy vuestro hermano y compañero trabajador en el reino y Paciencia en Jesucristo.

P. P. Pratt.

 

Otro hecho histórico de Sudamérica consignado en la Autobiografía de Parley P. Pratt dice relación con la batalla de Caseros librada en Argentina en febrero de 1852

 

 


Batalla de Caseros.

 

“En Buenos Aires todavía hace estragos, y una gran batalla se espera que pronto ocurra entre los ejércitos aliados de Brasil y Montevideo por un lado, y Buenos Aires por el otro. Los dos ejércitos suman casi veinticinco mil hombres cada uno, como se ha informado”. Parley P. Pratt.

 

En la Batalla de Caseros, ocurrida el 3 de febrero de 1852, el ejército de la Confederación Argentina, al mando de Juan Manuel de RosasEncargado de las Relaciones Exteriores de la Confederación Argentina, fue derrotado por el Ejército Grande, compuesto por fuerzas del Brasil, el Uruguay y las provincias de Entre Ríos Corrientes, liderado por el gobernador de Entre Ríos, Justo José de Urquiza, quien se había sublevado contra Rosas el 1º de mayo de 1851 en que lanzó el llamado Pronunciamiento de Urquiza.

La batalla culminó con la victoria del Ejército Grande y la derrota de Rosas, que el mismo día renunció al gobierno de la provincia de Buenos Aires.

 

 

 

El Evangelio en Sudamérica

 

Una Carta del Élder Parley P. Pratt[i]

 

Valparaíso, Chile, Sudamérica, 24 de noviembre de 1851.

 

 


Muelle de Valparaíso, siglo XIX. Archivo Histórico.

 

 

           

El siguiente es el extracto de una carta escrita al Presidente Brigham Young durante el viaje de regreso desde Chile a San Francisco:

 

BARCO “DRACUT,” OCÉANO PACÍFICO, lat. 18.

13 de marzo de 1852.

 

PRESIDENTE YOUNG.

 

         Querido Hermano- Estamos todos bien. El Élder Rufus Allen, yo y mi esposa, salimos de San Francisco, el 5 de septiembre de 1851, para Chile, S.A., y llegamos a Valparaíso, el 8 de noviembre - en un viaje de sesenta y tres días. Desde ese tiempo hasta ahora he estado dedicado al estudio del idioma español, de las leyes, sus constituciones, su geografía, su historia, su carácter, su religión, sus modales, sus costumbres, sus revoluciones, y acontecimientos de Chile y Perú en particular, y de Hispanoamérica en general.

         Por intensa aplicación luego llegué a ser capaz de leer con cierto grado de entendimiento e interés en este idioma. Ya he leído partes del Nuevo Testamento, mientras, que en el mismo idioma, he copiado muchos de sus pasajes más importantes, y los he leído tal vez unas veinte veces - dándome el cometido de memorizar algunos de ellos.

 

 

 


Araucanos

 

         También he leído un pequeño trabajo, sobre Historia Natural de Chile, casi tres veces, en el cual hay muchos curiosos e importantes datos relacionados con las guerras de la brava y patriota nación de hombres libres llamados Araucanos. Éstos han mantenido su libertad e independencia inalterable por 300 años contra los poderes combinados de la vieja España y de todas sus colonias, sosteniendo una guerra defensiva, con muy poca tregua, por casi 200 años, sin armas de fuego u otros medios modernos de defensa. Parte de su historia espero traducir y publicar posteriormente.

 


 

Lautaro, joven guerrero de Arauco.

 

         También he leído en español el texto escolar de la geografía de Chile, y algunos otros trabajos, mientras que una constante lectura de sus diarios, además de los de Perú y de Buenos Aires, me han dado una visión general de sus gobiernos, leyes, políticas, religión, revoluciones, esperanzas y proyectos.

         Las guerras civiles, y mis propias circunstancias financieras, pero más particularmente la carencia del lenguaje, limitaron mucho mis viajes por el país, y aún de visitar a los Araucanos. Yo, sin embargo, visité un pequeño pueblo en el interior, cuarenta millas, y vivimos allí por un mes.

         El segundo día de marzo nos embarcamos en este barco para San Francisco, sin la suficiencia del lenguaje como para dar la vuelta a las llaves del Evangelio a estas naciones. Nos quedamos hasta que nuestros medios se acabaron y buscamos y oramos diligentemente para que nuestro camino fuera abierto; pero no pudimos hablar el idioma lo suficientemente bien como para predicar el evangelio, ni encontramos un medio de ganarnos la vida, así que se nos hizo necesario regresar a California, mientras tanto seguimos estudiando el idioma a bordo.

         Tenemos un agradable joven en la cabina que es muy servicial con nosotros. Es originario de Chile, lee y conversa con fluidez en español, es versado en las escrituras, las cuales leemos y analizamos juntos. Él tiene mi Biblia en español y la está leyendo. Le he hablado de nuestra doctrina, del bautismo, de la persecución a la Iglesia, del establecimiento en las montañas, y del Libro de Mormón: También de los males del adulterio, la borrachera, el juego, y otros pecados, y las iniquidades de las abominaciones católicas. Él ha tomado todo esto de buena forma, y habla de ir a las montañas con nosotros. Lo que es muy notable para ser chileno, es que ni fuma ni bebe. Él posee algunos recursos, y está yendo a California para incrementarlos. Oramos mucho en secreto para que Dios abra su corazón y nos lo dé como una ayuda en el ministerio.

         Los chilenos son una raza con mezcla de sangre española e india - cuatro quintas partes dicen son indios – lo que se manifiesta en sus gestos toscos, sus cabellos y ojos negros, la frente baja, los pómulos altos, rostros anchos y en la mayoría de los casos de color cobrizo en sus diferentes matices y grados, aunque unos pocos son blancos y aún bellos y hermosos. En general ellos son ignorantes y devotos católicos. Probablemente más de la mitad de ellos no sabe leer ni escribir. Su conocimiento de las artes y de la industria es sumamente limitado. En sus modales son simples, francos, y extremadamente sociables y aparentemente afectuosos, pero sujetos a una pequeña debilidad en sus tratos, y con tendencia al robo. Hay, sin embargo, muchas honorables excepciones a estas faltas o malos hábitos.

         La Biblia en general no es usada entre ellos, estando prohibida por su religión; pero encontré a muchos que ya la han leído, y todos, con quienes realicé el experimento, parecieron dispuestos a escuchar su lectura. Algunos dicen que podían comprenderla mejor cuando la leía yo, que cuando la leían sus propios compatriotas.

         Hablé libremente a muchos en contra de las supercherías y los errores; mostrándoles a ellos la verdadera forma del bautismo, etc., lo cual raramente les ofendió.

         Ellos me hablaban con frecuencia de las abominaciones de sus sacerdotes, y de como ellos administraban todas las ordenanzas por dinero, a tanto por cabeza. La constitución consagra la religión Católica Romana, la apoya con presupuesto y prohíbe a todas las otras. Existe, a pesar de esta prohibición, una Iglesia Anglicana y una Iglesia Congregacional Americana en Valparaíso.

         Visité esta última y conversé con el ministro. Él dijo que no era difícil importar libros religiosos o diarios y la distribución de los mismos, aun cuando la prensa no era libre de imprimir o publicar sobre ninguna religión que no fuera la católica. Él había importado y distribuido Biblias en español, y las había puesto a la venta en las librerías. Libros extranjeros son importados libres de impuesto.

         La revolución que asola tan violentamente en esta época a Chile profesa estar en favor del sufragio universal, y de la absoluta libertad de conciencia, de expresión y de prensa. Las masas, hasta donde yo soy capaz de juzgar, son ardientemente revolucionarias, pero no les gusta combatir. La revolución costó unas cinco mil vidas, y terminó en una amnistía general, sin ninguna alteración en el gobierno. Pero la gente es optimista en sus esperanzas - ellos piensan que conquistarán sus libertades en algunos años más”. P. P. Pratt.

 

 

OCÉANO PACÍFICO, lat. 3° N.

Marzo 27, 1852.

 

 

         Queridos Hermanos - Hemos navegado treinta y tres días y hecho casi la mitad del viaje. Estamos bien, y el viento está generalmente bastante bueno, pero ahora está en calma. El hermano Allen y yo todavía estudiamos el idioma con diligencia, y todavía hablamos con el chileno, quien también está leyendo diligentemente nuestra Biblia en español.

         El “Libro de Mormón,” “Una Voz de Amonestación,” etc., han estado rotando, y han sido leídos por el capitán y sus compañeros; pero ellos no creen, ni en el testimonio de hombres ni de ángeles. Sin embargo, hay un hombre joven sobrio e inteligente, que está muy interesado.

         Abril 29, lat. 27° N. – Cincuenta y cinco días han pasado como una penosa prisión para nosotros, con muy poco para comer. Vivimos con un pequeño, pobre y duro pan, probablemente cocido unos dos o tres años atrás, y algunos porotos y una muy pobre y perjudicial carne salada y cerdo. No tenemos harina, papas, azúcar, melaza, arroz, u otras comodidades, aún cuando pagamos un buen precio por el pasaje en camarote.

         No hemos tenido ni un buen día de buena navegación en el último mes; tenemos calmas y fuertes vientos. Rara vez navegamos más de treinta o cincuenta millas en veinticuatro horas. Estamos hambrientos, débiles, solos, y desconsolados. Pero, después de mucho orar por un buen viento y velocidad, encontramos que nuestras oraciones no han sido contestadas, y nos hemos rendido, y le hemos pedido a nuestro Padre Celestial que nos dé paciencia y reconciliación con Su voluntad.

         Estamos ahora a unas ochocientas o novecientas millas del puerto, y nuestras provisiones (pobres como lo son) pronto se nos acabarán. Pero vivir o morir nosotros confiamos en Dios y tratamos de servirle a Él.

         No hay nadie a bordo que tema a Dios o respete al hombre, hasta donde sepamos, exceptuando a uno de los marinos y a nosotros. Las más horribles blasfemias resuenan en nuestros oídos cada día en el camarote y sobre la cubierta, provenientes tanto del capitán como de sus pares, con borrachera y pensamientos inicuos.

         Nosotros somos rechazados y odiados a causa de nuestro testimonio, y porque nuestro ejemplo es una reprobación. Pero nosotros nos preocupamos de nuestros propios asuntos, y estudiamos el idioma y las Escrituras cada día.

         El hombre joven de quien hablo es el Sr. Howard, de los Estados Unidos, quien es bien educado, y ha leído nuestros libros con mucho interés durante el viaje, y ha pedido ser bautizado y unirse a la Iglesia apenas arribemos. Él no está acostumbrado a la vida marinera, y desea ir a las montañas con nosotros. Él ha sido educado en colegios y como oficinista. Pienso que su llamamiento es predicar el evangelio, pero aún no le he dado a entender eso a él.

         Hermanos, Deseo verles a todos ustedes con un deseo como jamás lo he sentido en mi vida. Siento que quiero sentarme con ustedes y buscar los poderes y los dones de Dios y los poderes de los cielos, aún aquellos que serán derramados para la restauración de la Casa de Israel.

         Oh, ¿cuándo llegará ese tiempo? ¿Cuándo el velo será rasgado para que todos los poderes del apostolado sean permitidos o ejercidos sobre la tierra? Debe ser pronto o ninguna carne se salvará - porque los poderes de la oscuridad prevalecen a tal grado que aún pueden llegar a sentirse físicamente.

         No hay nadie que conozca al Señor; nadie que busque la verdad; nadie que la aprecie cuando la encuentra; nadie que se incline a dejar el pecado. Me hubiese gustado que se dijera que ha sido encontrada en la tierra. Encontrar a uno es como encender una lámpara y buscar diligentemente alimento entre los calabozos de la oscuridad, la muerte y el hambre.

         Adiós y hasta que arribemos.

                                                                                Vuestro hermano

                                                                   

                                                                                            P. P. Pratt

 

 

 

 

“Después de un largo y tedioso viaje de setenta y nueve días llegamos a San Francisco el 21 de mayo, habiendo sufrido duramente los últimos cuarenta días por la falta de alimento adecuado.

         Después de descansar y recuperarnos por unos días, mi tiempo fue otra vez dedicado al ministerio de la Iglesia en San Francisco y San José, visitando, estudiando el idioma, escribiendo a los otros misioneros, y en la preparación de nuestro viaje de regreso a casa, hasta cerca del fin de julio, y yo aquí agregaría, que, a causa de la bondad de mis hermanos y amigos, casi mil doscientos dólares en moneda, mulas y un carromato me fueron proporcionados para ayudarme en mi misión y para mi viaje a casa, los cuales se me dieron en diferentes momentos después de mi arribo desde Chile”. Parley P. Pratt.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El Martirio del Élder Parley P. Pratt.

13 de mayo de 1857

 

 

         “Una liviana lluvia comenzó a caer, haciendo fácil para McLean y sus hombres seguir las huellas de Parley, quien viajó por unas veinte millas fuera del pueblo antes de que lo alcanzaran. McLean, quien estaba en su usual estado de embriaguez, y seis de sus secuaces sedientos de sangre, cabalgaron hasta donde estaba Parley y lo rodearon. Dos hombres se pusieron frente a él, obstaculizando su camino, mientras que McLean vino desde atrás y disparó seis tiros a una distancia muy corta. Las balas perforaron el pesado abrigo de Parley, pero ninguna lo hirió.

         “Entonces uno de los rufianes se adelantó, sacudió al caballo de Parley para que se encabritara asustado, dándole a McLean la oportunidad para acercarse lo suficiente como para clavar dos veces en el costado de Parley su cuchillo”.  Parley cayó al suelo, pareciéndole que sus asaltantes huirían. Sin embargo, McLean regresó dentro de diez minutos, desmontó, y, tomando una pistola derringer de uno de sus compañeros, disparó a Parley en el cuello, mientras yacía en el suelo. Entonces los asesinos cabalgaron salvajemente al pueblo para celebrar”.  Eleanor McLean.

 

            El Élder Wilford Woodruff registró en su diario el día 23 de junio de 1857 lo siguiente:

 

“El correo del este llegó trayendo la triste noticia del asesinato del Élder Parley P. Pratt, quien fue asesinado cerca de Ft. Smith en Arkansas, por un hombre llamado McLean". Wilford Woodruff.

 

         Por su parte el Presidente Joseph Fielding Smith escribió:

 

“En el otoño de 1856, Élder Pratt había dejado la ciudad de Lago Salado con un grupo de misioneros, con quienes cruzó las planicies. Ese invierno él trabajó en St. Louis, Philadelphia, New York y otras ciudades del este. En la primavera de 1857, él estaba en Arkansas y mientras estaba allí intentó ayudar a la Sra. de Hector H. McLean, (Eleonor J. McComb) quien era miembro de la Iglesia, a conseguir la tuición de sus hijos, habiéndose ella separado de su esposo por causa de sus borracheras y su crueldad. McLean acusó a  Élder Pratt de indisponer los afectos de su esposa e intentó llevarse por la fuerza a los niños. Un juicio fue seguido, y Élder Pratt fue liberado del cargo. Poco después, mientras viajaba por el Condado de Van Buren donde la corte se había reunido, intentando unirse a una compañía de emigrantes que viajaba para Utah, él fue seguido por McLean quien le hundió un cuchillo en su costado. Después de que Élder Pratt hubo caído de su caballo,  McLean disparó sobre él con su pistola…De esta forma murió uno de los grandes expositores de la fe de los Santos de los Últimos Días, un poeta y escritor, cuyas obras le sobrevivirán y harán mucho por traer a multitudes al conocimiento del Evangelio. Aun cuando la voz de su autor ha sido silenciada, su obra todavía hablará con convincente poder”.

El asesinato a sangre fría del Élder Parley P. Pratt ocurrió cerca de Van Buren, Arkansas, el 13 de mayo de 1857, hecho del cual él Élder John Taylor publicó en Nueva York, el siguiente extracto en “The Mormon” el día 30 de mayo de 1857.

 

 

EL ASESINATO DEL PRESIDENTE P.P.PRATT

 

“Nuestros lectores están indudablemente estremecidos con la anterior noticia, nuestro corazón está profundamente apenado, pero no tenemos razón para dudar de la triste noticia que nos ha llegado, aun cuando, todavía sea, sólo por vía de la prensa pública. Unos pocos días atrás fuimos avisados de su detención cerca de Fort Gibson; y, muy pronto tras recibir esa información, supimos, por un despacho telegráfico, que había sido asesinado cerca de Van Buren, Arkansas el 13 de mayo.

“Como no tenemos espacio esta semana para entrar en mayores detalles, y puede ser que antes de la siguiente edición recibamos información adicional sobre el tema, sólo diremos para el beneficio de aquellos que están interesados, que sus asesinos lo siguieron por unas doce millas desde el lugar del juicio, y sacando partida de su condición solitaria, dispararon sobre él.

“Aun cuando deploramos profundamente la pérdida para la Iglesia de tan gran y recto hombre, y el desamparo para su familia, todavía no lo lamentamos. Su vida ha sido una de honor y fidelidad; sus días han sido bien gastados en el servicio de su Dios; su nombre es reverenciado por miles y decenas de miles, y será honrado por millones aún por nacer, mientras que sus cobardes asesinos, y aquellos que han celebrado este deleznable hecho, y que ahora se regocijan con su crimen, serán aborrecibles, y un hedor en las narices de Dios y de los hombres buenos”.

 

Su hermano Orson Pratt escribió concerniente a la muerte de su hermano Parley:

 

“¡Oh, cuan placentera es la muerte de una persona recta! Quedando sepultado su cuerpo con una cierta y segura esperanza de que saldrá de la tumba en la mañana de la primera resurrección, para reinar como un poderoso Rey y Sacerdote del Más Alto Dios, para sentarse en un trono de gloria eterna, gobernando con poder por siempre y para siempre.

“¡Oh, bondadoso y afectuoso hermano! ¡Cuánto te amamos en vida! ¡Cuán gozosas fueron para nuestra alma las palabras de vida que fluyeron de tu boca por el puro espíritu de inspiración! ¡Cuán querido es todavía nuestro recuerdo de ti! ¡No lloramos por tu muerte, porque fue gloriosa! ¡Tú nos has dejado solo por un corto momento, y pronto te abrazaremos otra vez! ¡Tus cincuenta años recién habían comenzado, y ahora tu Jubileo ha llegado! Descansa en la casa de tu padre, con todos los nobles mártires del siglo diecinueve, hasta que el Jubileo de la tierra también llegue; entonces tú regresarás y reinarás triunfalmente con todos los redimidos de la raza de Adán”.

 

En su tumba encontramos la siguiente inscripción con parte del texto de uno de sus himnos.

 

Fulgura La Aurora

 

Parley Parker Pratt

Apóstol – Misionero - Autor

Nació el 12 de abril de 1807

en Burlington New York.

Murió el 13 de mayo de 1857

cerca de Alma, Arkansas.

Miembro del Concilio de los Doce

Apóstoles de la Iglesia de Jesucristo

de los Santos de los Últimos Días.

 

Ya rompe el alba de la verdad

y en Sión se deja ver, tras noche

de oscuridad, tras noche de oscuridad

El día glorioso amanecer.

 

De ante la divina luz,

huyen las sombras del error.

La gloria del gran Rey Jesús,

La gloria del  gran Rey Jesús,

Ya resplandece con su fulgor.

 

 

Élder Parley P. Pratt, fue un Precursor de la Historia de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en Sudamérica.  1807 – 1857

 

LA BIBLIOTECA SANTIAGO SEVERIN DE VALPARAÍSO GUARDA SU LEGADO

 


 

Biblioteca Santiago Severin, Valparaíso.

 

Gran parte de los diarios y libros de la época en que el Élder Pratt visitó nuestro país se guardan en la Biblioteca Santiago Severín de Valparaíso, especialmente lo que dice relación con la prensa chilena y extranjera de la época y de la cual él fue un ávido lector. Es por ello que la obra que recoge los hechos de su vida ahora forma parte de la Biblioteca que guarda las fuentes originales que él consultó durante su estadía en Valparaíso, Chile, entre los años 1851 y 1852 a fin de estudiar las condiciones de los países latinoamericanos con la vista puesta en el futuro establecimiento de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en estas tierras Sudamericanas.

La Autobiografía del Élder Parley Parker Pratt se encuentra en esta biblioteca en sus ediciones en inglés y español para la consulta del público lector.

 

 

 

 

 



[1] Patricio Quezada Andaur, Historiador del Archivo Histórico Patrimonial de Viña del Mar. El antiguo camino carretero de Quillota 




NOTAS

 

 

[i] Esta carta fue publicada en el Millenial Star del 15 de febrero de 1852. Tomo 5.



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